Justo cuando se llegas a la conclusión de que no necesitas un perro ya que siempre parece demasiado grande, demasiado pequeño, flexible o quisquilloso, te encuentras con un Boston terrier. Este perro se ve fuerte, observador, inteligente y tiene el tamaño justo. Es sin duda alguna encantador.
Aspecto de un Boston terrier. Cuando te fijas en un Boston terrier puedes ver un perro compacto y bien proporcionado. Tiene la piel lisa y el pelaje puede ser de color negro, rojo, atigrado o marrón acentuado con marcas blancas. Apodado el caballero americano por ser una raza doméstica y por su apariencia, el Boston terrier tiene una nariz corta y el hocico cuadrado. Su tamaño es de 15 a 17 pulgadas de altura y pesa de 10 a 25 libras, lo que le permite adaptarse fácilmente a vivir en una casa o apartamento. Tu Boston será musculoso, de pecho ancho y cola corta. Sus orejas serán erguidas sobre su cabeza y tendrá grandes y redondos ojos marrones.
Actitud de un Boston terrier. Cuando el Boston terrier entre en tu casa, su simpatía y disposición inteligente se ganarán tu corazón. Le encanta jugar, una característica útil para el ejercicio de interior y formación. Aprende rápidamente, le gusta ser atendido y recibe con entusiasmo las clases de agilidad, obediencia y otras actividades. Tu Boston disfruta de caminar a tu lado y el ejercicio moderado beneficia su salud física y mental. Necesita que seas su líder; un Boston sin entrenamiento se vuelve mandón. Si piensa que es el jefe tendrás un perro deliberado y provocador que puede darte a conocer su opinión con ladridos y mordiscos. Dale formación y afecto y tendrás un perro modelo.
La salud de tu Boston terrier. Cuando tienes un Boston terrier debes conocer cuáles son sus problemas de salud. Hay más de 20 enfermedades de los ojos que pueden afectar a esta raza. Como sus ojos sobresalen ligeramente de su cráneo son vulnerables a las lesiones. Tu Boston puede tener una tendencia genética hacia la sordera. Puede desarrollar problemas de rodilla por traumatismo o debilidad genética. Las articulaciones de la rodilla son pequeñas y frágiles, por lo que debes evitar sujetarlo o apretarlo por las patas. Una lucha juguetona puede dañar permanentemente su rodilla. Mantenlo en un peso adecuado y evita que realice actividades que puedan dañarle las rodillas. Los ronquidos y el babeo, al igual que en otros perros de cara plana, le impiden respirar con facilidad. El exceso de ejercicio en climas calientes o fríos puede provocarle malestar al respirar y puede causarle la muerte. La moderación es la clave para su salud, así como para evitar las facturas del veterinario.
El cuidado de un Boston terrier. Cepilla y peina su suave pelaje corto, una tarea que toma sólo unos minutos. Limpia su cara con un paño húmedo, esto le quita la baba, el polvo y el polen que irrita su piel. Presta especial atención a los ojos, revisa las orejas, la nariz y los ojos en busca de semillas de césped u otros desechos. Mantén sus uñas recortadas. Con amor, buena atención y ejercicio, tu querida mascota puede vivir 15 años o más.