Proteger la salud bucal de tu perro es fundamental para que tenga una buena salud general. Es muy posible que a tu perro no le guste lavarse los dientes, lo que traerá como resultado una acumulación de sarro que puede conducir a una enfermedad periodontal. Las mascotas también pueden perder y romperse los dientes al masticar un hueso y algunas razas son propensas a tener los dientes desalineados o torcidos. Como tu mascota no puede decirte que le duele la boca, tienes que velar por su salud bucal.
Enfermedad periodontal. Los perros a los 3 años de edad pueden mostrar signos de enfermedad oral. La placa se acumula en los dientes y se endurece hasta formar el sarro que, si no se elimina, resulta en gingivitis o inflamación de las encías. Eventualmente puede desarrollar una enfermedad periodontal. En las encías se forman una especie de bolsillos creando más lugares para que las bacterias se reúnan. Las bacterias pueden aflojar los dientes, crear abscesos e infecciones. La infección viaja a través de la sangre y puede afectar el corazón, el hígado y los riñones. Cepillar los dientes de tu perro diariamente ayudará a reducir la acumulación de sarro. Algunos alimentos para perros y golosinas también reducen el sarro.
Dientes flojos y partidos. Además de masticar objetos duros, la pérdida y fractura de los dientes suceden debido a la edad, la salud, las necesidades alimenticias y la carencia de higiene dental. Los incisivos son los más propensos a romperse. Un diente roto deja expuestas las terminaciones nerviosas, una condición que resulta dolorosa para el perro. Las partículas de alimentos pueden alojarse en el área motivando la acumulación de bacterias y posibles infecciones. Evita darle a tu perro huesos naturales ya que son abrasivos para sus dientes. En su lugar, dale juguetes diseñados para que los perros los mastiquen. Dale a tu perro un alimento de calidad y llévalo al veterinario para que le hagan limpiezas regulares.
Dientes desalineados y torcidos. Las razas toy no siempre pierden sus dientes de leche. Si los dientes de leche no son expulsados, los dientes adultos pueden crecer de manera irregular, lo que provoca que los dientes estén torcidos. Es posible que tengas que quitarle a tu cachorro algunos dientes de leche cuando tenga de 10 a 12 semanas de edad. A los 6 meses, todos los dientes deben desaparecer. Los dientes torcidos se desarrollan cuando las mandíbulas superior e inferior no se alinean correctamente. El perro puede padecer una condición conocida como sobremordida, lo que puede causarle problemas al masticar los alimentos.
Signos comunes. Debido a que las mascotas no pueden decirnos que le duele la boca o sienten incomodidad, debes buscar algunos signos comunes. El signo más reconocible es el mal aliento. El mal aliento puede significar que hay bacterias en la boca. Babeo, dolor en la boca, dificultad para comer, sangrado de las encías, patear o frotar la boca, dientes sueltos, así como sarro amarillo y marrón en los dientes, son señales de que tu perro probablemente tiene problemas en los dientes. Sólo un veterinario puede hacer un diagnóstico acertado.