No malestar estomacal, no diarrea y no vómitos; estos son los objetivos cuando se le cambia el alimento a un cachorro. Si tu cachorro está listo para la comida para adultos, o si deseas cambiar su croqueta a un alimento de mejor calidad, el proceso es el mismo; hágalo lentamente.
Elementos que se necesitan
• Taza de medir
• Alimento anterior
• Alimento nuevo
Paso 1. Mida el 75 por ciento de los alimentos actuales del cachorro en una taza de medir, y lo colocalo en su plato. Si está acostumbrado a tener una taza de comida, mida 3/4 taza de comida. Añada el 25 por ciento restante del alimento nuevo, y mezcla los dos alimentos juntos. Dale de comer esta mezcla durante dos o tres días.
Paso 2. Aumenta la relación de proporción de los alimentos nuevos. Combina cantidades iguales de cada comida, o el 50 por ciento de cada tipo. Mézclalos juntos y dáselos de comer durante otros dos o tres días.
Paso 3. Aumenta el alimento nuevo a un 75 por ciento, y disminuye el anterior a un 25 por ciento. Mezcla los dos alimentos juntos y (lo que es fácil adivinar) déselo de comer durante otros dos o tres días.
Paso 4. Cambie a la nueva comida. Su cachorro debe ser capaz de manejar ahora el 100 por ciento de la nueva comida. Si tiene indigestión o diarrea, agregue un poco de la vieja comida por unos cuantos días más.
Consejos y advertencias
- Al cambiar de alimentos, hágalo a un alimento de calidad, que contenga carne en sus tres primeros ingredientes. Evite croquetas que enumeran subproductos cárnicos. Los subproductos de la carne son las partes de animales, como el cerebro, la sangre y hasta los huesos.
- Evite alimentarlo con bocadillos durante el proceso de conmutación. Dele su tiempo para adaptarse a la nueva alimentación.