Tanto los perros como los gatos son mascotas excelentes, e incluso hay evidencia de que tener una mascota puede mejorar la salud tanto mental como física. Sin embargo, no todos los animales funcionan bien con cada estilo de vida y es importante contemplar cuidadosamente tus necesidades y el tiempo disponible al elegir un perro o un gato.
Perro contra gato
Paso 1. Considere el tiempo que tiene disponible para dedicárselo a una mascota. Mientras que los perros, especialmente los cachorros, necesitan caminatas frecuentes, la mayoría de los gatos se contentan con pasar tiempo a solas cada día. Si se tiene un horario de trabajo muy exigente, un gato puede ser una mejor opción, a menos que se pueda contratar a un paseador de perros.
Paso 2. Sopesar los beneficios de un gatito o un perrito contra un perro adulto o un gato. Los perros adultos son por lo general más tranquilos, sobre todo si no tienen problemas de comportamiento. Los cachorros, sin embargo, tienden a ser más enérgicos y dispuestos para el entrenamiento. Los gatitos son más fáciles de socializar mientras que los gatos adultos suelen ser más apegados a sus costumbres. Si tiene mucho tiempo para pasar con una mascota nueva y está interesado en aprender cómo entrenar a su compañero, un cachorro es la mejor opción. Por otro lado, si tienen poco tiempo y paciencia, considere adquirir un perro adulto de buen comportamiento.
Paso 3. Valore por qué quiere una mascota. Si está buscando un buen amigo con el que se puede hacer todo, un perro puede ser la opción excelente. Los gatos suelen tener una conducta independiente y no podrá disfrutar mucho de su atención. Estos son una mejor opción si está buscando un compañero que de vez en cuando se acurruque en el sofá contigo, pero que no exija constantemente de paseos y tiempo de juego.
La elección de una mascota
Paso 1. Observe cómo el perro o gato interactúa con las personas y otros animales. Mientras que los cachorros y los gatitos pueden ser socializados para perder el miedo, los animales adultos son más propensos a mostrar su personalidad una vez que llegan a tu casa. Si observa signos de miedo, es posible que desee considerar un animal diferente a menos que esté interesado en la rehabilitación de una mascota temerosa.
Paso 2. Pregunte acerca de la salud y el historial de vacunación del animal para que pueda proporcionarle atención veterinaria adecuada. Si bien las condiciones de salud a largo plazo no deben impedir necesariamente la adopción de un animal, debe saber acerca de los gastos extraordinarios que pueden surgir.
Paso 3. Consulte con otros miembros de la familia y evita tomar una decisión instantánea. Para adoptar con éxito una mascota, es importante que todos en su familia disfruten de la mascota. También es aconsejable tomarse un par de días, si se puede, para pensar acerca de la mascota que has elegido y considerar cómo el animal se ajusta a su estilo de vida. Un lindo perrito o un gatito pueden ser tentadores en un momento de debilidad, pero si te tomas un par de horas puedes darte cuenta de que no tienes las condiciones necesarias para albergarlos en tu casa.
Consejos y Advertencias
- No siempre hay que elegir entre un perro o un gato. Los perros y los gatos pueden vivir juntos en paz, sobre todo si son criados juntos desde que son cachorros.
- Considera la adopción de un animal de rescate o refugio. Muchos de estos animales están bien entrenados y son amables, pero necesitan desesperadamente de una casa.
- Cada animal es diferente, algunos perros pueden actuar más como gatos y algunos gatos pueden estar muy necesitados de atención. Es importante tener en cuenta la personalidad específica de la mascota, en lugar de guiarse por los estereotipos generales sobre perros y gatos.
- Evite la compra de animales con los criadores de traspatio, estos animales son mucho más propensos a tener problemas de conducta.