Las almohadillas de las patas de un Husky son una parte importante de su cuerpo que le permiten mantenerse sano. Las almohadillas protegen los tejidos profundos que se encuentran dentro de la pata, proporcionan amortiguación para proteger las articulaciones de los golpes y ayudan a tu perro a caminar sobre superficies rugosas. Mantener las patas de tu Husky en buen estado le permitirá ejercitarse y jugar contigo sin dolor.
Productos que necesitas
- Peine metálico
• Tijeras redondeadas
• Cortaúñas
• Crema humectante para las patas
• Pinzas
• Lavado antibacterial
• Bola de algodón
• Gasa laminada
• Esparadrapo
• Zapatos para cachorros (opcional)
Cuidado de rutina de las patas
Paso 1. Siéntate en el suelo y pídele a tu Husky que se acueste junto a ti. Mantén una pata en tu mano. Usa un peine de metal para desenredar y extender el pelo hacia afuera entre cada almohadilla de la pata. Toma un par de tijeras de punta redonda con la otra mano. Coloca las tijeras en la parte superior de las almohadillas con las cuchillas en posición horizontal a la pata. Corta el pelo que hay entre las almohadillas a la misma altura. Corta el pelo de cada pata de esta manera.
Paso 2. Corta las uñas de tu Husky justo por encima del nivel del suelo. Sostén una pata con una de tus manos de forma tal que las uñas queden abajo. Coloca la uña en el centro de la guillotina. Aprieta los mangos a la misma vez para que puedas cortar la uña. Puedes cortar las uñas mientras estén de color blanco y hasta que veas los vasos sanguíneos. Realiza varios cortes pequeños en las uñas negras ya que no puedes ver a través de ellas.
Paso 3. Frota una crema hidratante en las almohadillas de tu perro para mantenerlas húmedas y evitar que se agrieten cuando haya mucho calor. A los perros por lo general les gusta esta forma de pedicura y probablemente estén muy a gusto medida que masajeas sus patas. La acción también ayuda al flujo sanguíneo en las patas.
Cojera en un perro
Paso 1. Acuesta a tu Husky en el suelo para quitar la presión de las cuatro patas. Examina la pata de la que cojea en un ambiente bien iluminado.
Paso 2. Examina sus patas suavemente buscando un objeto extraño, ya sea en las almohadillas de las patas o entre las garras. Un perro generalmente se inquieta cuando encuentras el área sensible. Utiliza pinzas para quitar cualquier elemento que puedas encontrar en o entre sus almohadillas.
Paso 3. Limpia los cortes o heridas de sus patas o almohadillas con un lavado antibacteriano utilizando una bola de algodón limpio. Mantén un dedo en su pata y envuelve una gasa alrededor de la pata y la garra. Corta la gasa sobrante y coloca un fragmento de esparadrapo sobre el extremo suelto para fijarla. Esto protegerá el corte de infecciones que puede haber en el suelo.
Paso 4. Programa una cita con el veterinario si tu Husky tiene un corte de más de ¼ pulgada de largo ya que puede requerir atención profesional y antibióticos.
Consejos
- Elimina el exceso de pelo que hay las patas para evitar enredos que pueden ser incómodos permitiendo que sus almohadillas puedan tocar el suelo para mantener el equilibrio sin la interferencia de pelo.
- Inicia nuevas rutinas para caminar y trotar lentamente en un tramo corto y luego aumenta la distancia poco a poco. Esto permitirá que las patas de tu mascota puedan adaptarse al nuevo programa de ejercicio lentamente evitando lesiones.
- Comprueba las patas de tu mascota si está lamiéndoselas excesivamente: esto suele ser un signo de una lesión en la pata o un objeto extraño en ellas.
- Considera ponerle un par de zapatos para perros a tu Husky si tiene patas sensibles.
Advertencias
- No utilices crema hidratante de manos para personas en las almohadillas de las patas de tu perro. La versión humana hace que sus almohadillas se ablanden demasiado y puede provocar más heridas punzantes y cortes.
- No camines a tu mascota en la acera cuando está muy caliente ya que sus almohadillas pueden quemarse por estar en contacto directo con el concreto caliente, al igual que ocurre con los seres humanos cuando andan sin zapatos. Ten cuidado de no dejar que camine sobre grava o superficies rocosas para evitar que sus patas sufran lesiones.