Si tienes un Grifón de Bruselas, puedes tener la esperanza de estar a su lado durante 12 a 15 años. Debes tener en cuenta que tendrás que proporcionarle un buen cuidado y visitas regulares al veterinario para ampliar su longevidad.
La compra de un cachorro. Aunque no se puede tener seguridad de cuan larga puede ser la vida de un individuo, las probabilidades de que tu perro tenga una larga vida dependerá en gran medida de si se lo compras a un criador de renombre. Esta no es una raza muy común, además que las madres en ocasiones tienen camadas pequeñas. Si tienes que esperar un poco para comprar un cachorro de un criador responsable que sólo engendra perros sanos con un buen temperamento, valdrá la pena. Un criador que sólo está interesado en hacer dinero rápido presta poca atención a la salud y resistencia de los cachorros, podría darte un cachorro antes, pero podría no tener una larga vida debido a problemas genéticos.
Longevidad. Las razas pequeñas como el Grifón de Bruselas generalmente viven más que las razas mucho más grandes. Por supuesto, las estadísticas de longevidad se refieren a la muerte por causas naturales. Esta raza es un artista del escape y sabes que esto puede tener un final prematuro. Si tienes un patio cercado comprueba la cerca regularmente y asegúrate de que sea a prueba de cachorros.
Cuidados. La alimentación correcta y el ejercicio regular son importantes para la salud y el bienestar de tu pequeño amigo. Dale de comer un alimento para perros de alta calidad, algunas golosinas y sobras de la mesa. Si tiene el pelaje áspero, cepíllalo varias veces a la semana, puedes cortarte el pelo o llevarlo al peluquero para que lo haga cada pocos meses. Si tiene un pelaje suave sólo necesitará ser peinado ocasionalmente. Debido a que muchos perros pequeños desarrollan enfermedades periodontales por tener 42 dientes permanentes dentro de una pequeña boca, cepilla sus dientes todos los días. Este es un pequeño perro inteligente, por eso debes estimularlo con juegos de búsqueda y enseñarle trucos.
Salud. Mientras que todos los perros de raza pura son propensos a padecer ciertos problemas hereditarios, el Grifón de Bruselas es menos proclive que muchas otras razas, pero podría sufrir de displasia de cadera, una malformación de la articulación de la cadera que conduce a una artritis precoz. Al igual que otros pequeños perros es propenso a la luxación de rótulas. Problemas en los ojos incluyen cataratas y atrofia progresiva de retina que afecta a los perros más jóvenes y con el tiempo los deja ciegos. El Grifón de Bruselas podría verse afectado por la siringomielia, una enfermedad neurológica.