Aunque el nombre Porkie evoca imágenes de un pequeño perro gordo parecido a un cochinillo, un cachorro Porkie es en realidad un cruce entre un Yorkshire Terrier y un Pomerania. Esta raza mixta de «perro de diseñador» también se conoce con el nombre de Yoranian. No importa cuál sea su nombre, los cachorros son lindos.
Tallas. Los cachorros de Porkie son pequeños, incluso cuando están desarrollados completamente sólo pesan entre 3 y 7 libras. En la madurez miden entre 6 pulgadas y un 1 pie de alto siendo los machos un poco más grandes que las hembras. El American Kennel Club no reconoce el Porkie como una raza pero sí que tiene estándares de tamaño y peso si ambos padres son de raza pura. Algunos cachorros de Porkie son resultado del cruce de dos Porkies.
Apariencia. El Porkie, también conocido como Yorkie Pom, se asemeja a cualquiera de sus padres. Muchos tienen la apariencia de un terrier con el color de un Pomerania. Los criadores de Porkie tienden cruzar una hembra de Pomerania con un Yorkshire terrier macho. A pesar de que los Yorkies generalmente tienen un pelaje de color negro y cervatillo, el Porkie a menudo tiene el pelo largo del Yorkie con un color cervatillo, blanco u otros colores sólidos del Pomerania. Por supuesto, algunos cachorros parecen más Yorkies y viceversa. El Porkie requiere de un cepillado regular con viajes a la peluquería para que le corten y acicalen el pelo.
Temperamento. Criado para ser un perro de compañía, un Porkie ama a su dueño. Quiere sentarse en tu regazo o acompañarte en tus salidas. Ambas razas tienden a ser enérgicas, extrovertidas y alegres. Con todo esto a su favor la raza no requiere gran cantidad de ejercicio, siendo un buen perro para aquellas personas que viven en la ciudad. Tu cachorro Porkie es probable que sea un pequeño individuo alerta e inteligente.
Entrenamiento. Debido a que tu pequeña mascota es brillante y sensible, probablemente responderá bien al entrenamiento. Una buena formación no sólo te dará una mejor mascota sino ayuda a la unión de ambos. Al igual que muchos perros pequeños, el cambio de morada podría ser inicialmente problemático. Se paciente y constante y con el tiempo se acostumbrará a la idea.