La enfermedad neurológica conocida como mielopatía degenerativa apareció por primera vez en los Pastores alemanes. Esta enfermedad degenerativa de la médula espinal se ha encontrado en varias razas incluyendo al Ridgeback de Rodesia. Como hay pruebas genéticas disponibles los criadores diligentes pueden ayudar a eliminar la enfermedad de los genes del Ridgeback de Rodesia con solo aplicarla a sus reproductores y luego e ir filtrando las líneas de sangre de sus mascotas.
Mielopatía degenerativa. La mielopatía degenerativa se produce cuando la materia blanca de la médula espinal del perro, conocida como mielina, se empieza a romper. Esta sustancia grasosa sirve como una envoltura protegiendo ciertas células nerviosas. En los caninos es similar a la esclerosis lateral amiotrófica, también conocida como enfermedad de Lou Gehrig que afecta a los seres humanos.
Prevalencia. Según el Club de los Estados Unidos del Ridgeback de Rodesia (RRCUS) antes de 1991, sólo nueve casos de mielopatía degenerativa se habían confirmado en la raza. Sin embargo, entre 2005 y 2006, el RRCUS ayudó a subsidiar la patología y los costos de la autopsia para los propietarios que deseaban confirmar un diagnóstico concluyente pero necesitaban ayuda con los considerables gastos involucrados. La RRCUS informó que los casos tratados fueron confirmados como DM, «sugiriendo una mayor prevalencia de la enfermedad que se pensaba anteriormente».
Síntomas. La mielopatía degenerativa ocurre generalmente en los perros mayores. Los perros afectados empiezan a perder el control de sus patas traseras. Como la enfermedad es degenerativa los perros eventualmente pierden el control de las patas delanteras dando como resultado la parálisis total del cuerpo. Aunque no existe cura para la enfermedad los perros no parecen sufrir. Desde las primeras señales de DM pueden aparecer otras condiciones tales como hernias discales, por lo que en todos los casos con síntomas similares el veterinario realizará varias pruebas a tu perro. Esto podría incluir radiografías, exploraciones tomográficas y resonancia magnética. Un diagnóstico de mielopatía degenerativa es a menudo realizado después de que se descartan otras enfermedades más comunes.
Las pruebas genéticas. Los criadores de Ridgeback de Rodesia pueden realizarles pruebas genéticas a sus perros para determinar si son portadores del gen mutante de mielopatía degenerativa. Mediante una muestra de sangre los investigadores pueden determinar si un perro tiene la mutación. Una prueba que dé como resultado que el perro es «homocigótico saludable» quiere decir no es portador del gen, mientras que un resultado de «portador heterocigótico» significa que el animal tiene un gen afectado y que este podría pasar el gen de mielopatía degenerativa a su descendencia. Este último no tiene tanto riesgo de padecer mielopatía degenerativa pero debe ser reproducido sólo con un perro que no porte el gen. Los perros portadores «Homocigóticos» no sólo tienen dos copias del gen sino que tienen además un 100% de posibilidades de pasarlo y están en alto riesgo de desarrollar mielopatía degenerativa.