Si tu perro regularmente te aparta, podría ser porque quiere llamar tu atención o porque tiene miedo. También podría ser porque está tratando de mostrarte que está a cargo. Si miras bien el lenguaje corporal de tu perro, este puede decirte mucho sobre lo que está pasando dentro de su cabeza.
Atención. Tu perro puede empujarte o darte y chocarte para llamar tu atención. Por ejemplo, si estás en un paseo y te detienes a charlar con un vecino, tu mascota puede empujarte lejos de la otra persona para que continúes caminando. En otras palabras, no quiere que hables con otra persona que no sea él. Esto es un espectáculo inadecuado de dominancia. Enséñale a tu perro a sentarse y a quedarse cuando se lo dices. Si le haces caso a un empujón, eso significa que está ejecutando el programa y entrando en su juego, el cual repetirá ya que descubrió que le da buenos resultados.
Tres es una multitud. Nada más que te sientas abrazado a tu novia en el sofá tu perro salta en el medio y trata de alejarlos con un empujón para ocupar su lugar. Esto es otra forma ligeramente diferente de comportamiento dominante para llamar la atención. Tu perro quiere ser el número uno y aunque esto puede parecer lindo cuando es un cachorro, permitir el comportamiento podría conducir a eventuales comportamientos agresivos hacia tu pareja. Retoma el entrenamiento de obediencia básica y dile a tu perro donde puede y donde no puede sentarse.
Miedo. Si tienes un perro nervioso podría demostrarlo cuando está con personas desconocidas, lugares, sonidos o cosas que no son habituales. En este caso tu cachorro está intentando esconderse o buscar protección con tu cuerpo. Este tipo de empujón puede ir acompañado de temblores o sacudidas, quejas o meneos o incluso micción por nerviosismo. Si estás socializando a tu perro, debes animarlo suavemente para que participe en cualquier actividad que estás tratando de involucrarlo. Si tu perro siente temor por la presencia de otro animal, presta atención a sus advertencias y no fuerces la interacción.
Ansiedad por separación. Si tu perro pasa por un momento difícil cuando lo dejas solo, puede estar pegándose a tus piernas como una manera de hacer que te quedes o al menos de saber dónde estás en todo momento. Por ejemplo, puede ponerse en medio de la puerta para empujarte lejos e impedir que te marches. Este tipo de comportamiento puede manifestarse como un comportamiento destructivo cuando no estás y debe ser tratado. Habla con el veterinario para asegurarte de que tu perro no tiene ningún problema de salud que está provocando este comportamiento y empieza de manera gradual a pasar menos tiempo a su lado. Déjalo durante cortos períodos de tiempo y dale algo entretenido como un juguete o un hueso de juguete.