El West highland white terrier recibe su nombre de su tierra natal y el color de su pelaje. Por desgracia, el color cobre asociado a esta raza que no tiene nada que ver con tintes en su pelo y los niveles tóxicos de este mineral tienden a acumularse en el hígado de estos perros resultando en hepatopatías crónicas.
Enfermedad del hígado. Una anormalidad genética en la raza se asume que causa los niveles tóxicos de cobre que se acumulan en el hígado, pero hasta el momento de la publicación no hay ninguna prueba genética disponible para detectar a los portadores de esta condición. Esto significa que los criadores de Westie no pueden saber si un perro lleva este gen hasta que aparezca enfermedad. Aunque la enfermedad hepática es frecuente en la raza, las cifras reales son difíciles de saber. La hepatopatía crónica eventualmente lleva a insuficiencia hepática, pero ese proceso requiere mucho tiempo. La insuficiencia hepática aguda puede ocurrir repentinamente en Westies sin acumulación tóxica de cobre y puede matarlo rápidamente en cuestión de días.
Síntomas. El hígado puede soportar una cantidad determinada del mineral antes de que los síntomas de que hay daños aparezcan. Los perros más jóvenes son más propensos a la insuficiencia hepática aguda caracterizada por la aparición repentina de vómitos y letargo. Desafortunadamente muchos no muestran ningún síntoma evidente y los que lo hacen pueden sufrir problemas recurrentes del hígado durante el resto de sus vidas. Es fundamental minimizar el estrés en la vida de cualquier perro que sobreviva a la insuficiencia hepática aguda. Los Westies con insuficiencia hepática crónica tiende a adelgazar y generalmente se muestran letárgicos y enfermos.Esas señales sutiles pueden progresar en depresión y vómitos constantes si el perro no recibe tratamiento.
Diagnóstico. Aunque el veterinario le realizará exámenes de sangre y ecografías a tu Westie, la única manera de diagnosticar definitivamente la hepatopatía crónica es a través de una biopsia de hígado que se hace mediante una cirugía tradicional conocida como laparoscópica. Además de la información que el veterinario te dirá sobre la condición en general del hígado de tu Westie, la biopsia revelará el nivel de cobre que tiene acumulado en este.
Tratamiento. El veterinario puede prescribirle corticosteroides y medicamentos inmunosupresores a tu Westie para tratar de alviar el padecimiento. También puede indicarle una terapia con quelación de cobre, medicamento que ayuda a excretar el exceso de cobre a través de la orina. En dependencia de la asimilación que tenga tu mascota al medicamento, eventualmente podrá dejar de tomarlo. Algunos perros requieren de medicamentos durante toda la vida. Tendrás que seguir dándole una dieta baja de cobre. Esto incluye el hígado, el corazón y los riñones que se encuentran frecuentemente en los alimentos para perros así como los cereales y los mariscos. El veterinario puede ayudarte a organizar una dieta que contenga un poco cobre. El agua que le des a tu perro no debe salir de una tubería de cobre, lo que significa que generalmente tendrás que darle agua embotellada.
Cirrosis. Si la biopsia revela que tu Westie sufre de cirrosis en el hígado las expectativas no son buenas. Esto significa que gran parte de su hígado está cirrótico, o sea que tiene tejido cicatricial. El medicamento podría darle a tu perro tiempo de vida pero es algo que debes discutir con el veterinario.